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Las plantas del estanque

Siempre que hablemos de plantas de estanque, será preciso tener en consideración que es necesario contar con la posibilidad de que cada planta pueda arraigar, en su nuevo entorno.

Las épocas de plantación de estas preciosas especies.

Las épocas propicias para tal efecto, son la primavera, el verano y las primeras semanas de otoño. Sin embargo, es posible adaptar las plantas de estanque en invierno, dependiendo, eso sí, de qué tan intensa sea la época invernal en el área donde se encuentra ubicado el estanque mismo.

Las plantas del estanque

Variedades de Nenúfares europeos

Ahora, independientemente de la temporada en que se siembren, es preciso verificar que estas especies acuáticas cuenten con un buen estado de salud.

Para tal efecto, deberemos examinar que las puntas de las hojas no se encuentren deshilachadas, que no existan manchas negras y/o blancas y, además, que las raíces, los tallos y las hojas estén firmes y no demasiado flexibles.

Veamos, en primer lugar (no por orden de importancia), la preciosa especie de los Lotos, que son espectaculares plantas de enormes hojas de un peculiar color verde glauco, con un precioso follaje y con espléndidas flores que se elevan por encima de las gigantescas hojas.

Los lotos florecen desde finales de la primavera, hasta los principios del otoño, al tiempo que contamos con una interesantísima variedad en lo que respecta al color de las flores: todos los tonos del color rosa, el amarillo y el siempre bienvenido blanco.

El punto de atención de estos cuerpos de agua, son las plantas de estanque.

Continuado con el tema de los lotos, anotemos que, cultivados en un recipiente (que no tenga agujeros, eso sí), resultan una opción excelente, desde el punto de vista decorativo, para un jardín o un patio.

Anotemos, además, que los lotos deben ser cultivados a plena luz del sol y en recipientes sin agujeros (reiteramos) que sean, preferiblemente, de forma redondeada, con el fin de que los rizomas no se traben en las esquinas de un eventual recipiente cuadrado.

En lo que tiene que ver, esta vez, con la profundidad de los lotos, digamos que lo ideal es entre los 8 y los 20 centímetros de la superficie del agua.

Analicemos, esta vez, lo referente a las espectaculares Nucíferas, para decir que el “Nelumbo Nucífera” cuenta con grandes hojas de hasta 30 centímetros de diámetro, al tiempo que los preciosos pétalos son de un delicado color crema, con los bordes de color rosa y un amarillo intenso en el centro.

Dentro de la misma especie de las Nucíferas, tenemos la “Chinese Pink” que cuenta con espectaculares flores de color rosa, al tiempo que crecen hasta un metro de altura.

En lo referente a la “East India Red”, anotemos que lucen espectaculares y enorme flores de color fucsia. El nombre se debe a que las hojas nuevas se ven de un color rojizo precioso.

De otro lado pero en el mismo orden de ideas, recalquemos que no podían faltar las siempre admiradas Nenúfares, también denominadas “Nenúfares Perennes”, que “exhiben orgullosas” una gran variedad y belleza en sus espléndidas flores.

La forma, el color y la textura de sus hojas, suelen generar un precioso contraste con la superficie del agua, además de que les brindan sombra y refugio a los peces que, dicho sea de paso, tampoco podrán faltar en un buen estanque.

Los Nenúfares son plantas de estanque que se adaptan, especialmente, al clima templado y deben plantarse a una profundidad promedio de entre 15 y 45 centímetros.

En fin y a todas estas, son muchísimas las especies que se pueden plantar en un estanque, como es el caso, también, de la “N. Bárbata Dobbis”, de la “Marliacea Carnea” y de la “Marliacea Chromatella”, entre muchísimas otras.

Continuando con el tema de las plantas para estanques, hablaremos, esta vez, de la espectacular “Elodea Canadensis Michx”, que es una especie encuadrada dentro del grupo de las llamadas “Plantas Oxigenadoras” y, además, de algunas especies flotantes y sumergidas.

La siempre admirada Elodea Canadensis Mirchx.

Perteneciente a la familia Hydrocharitaceae, esta es considerada como una de las plantas para estanques que son “Oxigenadoras”, siendo bastante común en Wisconsin, en vista de que es nativa de allí.

Esta especie crece sumergida, completamente, aunque las puntas de algunas de sus ramas pueden llegar a flotar por sobre la superficie del agua.

En cuanto a su estructura, digamos que es ramificada mediante tallos lineales, sobre los que suelen crecer sus preciosas hojas lanceoladas, de una manera esparcida.

Cuando se encuentra en su hábitat natural, esta preciosa planta florece espléndidamente, al tiempo que mantiene sus flores flotando, como una estrategia biológica reproductiva.

Se trata de flores unisexuales, pequeñas y de color blanquecino, que se unen al resto de la planta misma mediante un fino escapo. Aclaremos, justo es decirlo, que esta especie produce brotes florales en su tallo, emergiendo a la superficie durante la primavera.

Los frutos, a su vez, son ovoideos y en forma similar a la de una cápsula. Además de lo anotado, tenemos que es capaz de propagarse con gran velocidad, gracias al método aludido.

Esta planta requiere de aguas ricas en nutrientes y en sedimentos. Crece en una interesante variedad de tipos de aguas, esto es, desde las someras hasta las relativamente profundas, siempre en presencia de sedimentos de diversa índole.

Juega un rol fundamental en los estanques, dado que brinda un hábitat complejo y rico en nutrientes para una gran variedad de anfibios y de pequeños invertebrados acuáticos.

Las Plantas Para Estanques, Que Son Flotantes.

Este tipo de plantas tienen la capacidad de crecer, flotando libremente, por sobre la superficie del agua del estanque, sin necesidad de arraigar.

Para combatir las siempre nocivas (para los estanques) algas, estas plantas flotantes son eficientes, en vista de que compiten, con gran eficacia, por todos los recursos naturales del estanque mismo, que son imprescindibles para su crecimiento, al tiempo que bloquean los rayos del sol, igualmente, con eficacia.

Destaquemos, también, que pueden absorber enormes cantidades de nutrientes que se encuentren disueltos en el agua del estanque, a una velocidad sorprendente.

Cuentan con apreciables hojas y raíces, que les sirve de refugio a los anfibios y de lugar de desove a algunas especies de peces.

Entre las plantas flotantes más apreciadas y destacadas, tenemos el “Helechito de Agua”, el “Camalote o Jacinto de Agua”, la “Lentejita de Agua”, la “Lemma Minnor” (que es otra forma de “Lentejita de Agua”), la “Lenteja de Agua”, el “Repollo de Agua” y muchísimas otras más.

Existen, además, dos especies de “Acordeón de Agua”: la “Salvinia Mínima” y la “Salvinia Molesta”. En otro orden de ideas pero en el mismo sentido conceptual, tenemos las llamadas “Plantas Sumergidas” que ofrecen una excelente protección para los peces, que habitan en las aguas medias y profundas de los estanques.

Es preciso aclarar, claro está, que se encuentran sometidas un ciclo anual, al tiempo que durante el otoño reducen la mayor parte de su estado para brotar, nuevamente, en la primavera.

Como sucede con todas las plantas acuáticas, éstas son ávidas de los rayos de sol, en razón de lo cual, se orientan hacia las capas más superiores del agua del estanque.

Se ha comprobado que estas plantas para estanques, tienen la sorprendente capacidad de absorber el nitrógeno amoniacal mediante sus hojas, reduciendo el nivel de amoníaco que, dicho sea de paso, es perjudicial para los anfibios y los peces del estanque mismo.

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